El lado más salvaje de Emilio Aragón

Tantos años intentando zafarse de una imagen de santurrón cuidadosamente construida, atreviéndose a protagonizar series no aptas para todos los públicos en las que incluso se escuchaban exabruptos como “¡Pardiez!”, y ahora resulta que lo único que tenía que hacer Emilio Aragón para darnos a conocer su lado oscuro era concederle la palabra a Pedro Ruiz.
Como presidente de Globomedia, Emilio Aragón tendrá que comparecer en el juzgado de primera instancia número 83 de Madrid para responder a las acusaciones de Pedro Ruiz. ¿Y en qué consisten las susodichas acusaciones? Según su abogado, Pedro Ruiz ha tenido que soportar “continuos descalificativos” contra su persona en programas como Caiga quien caiga, Qué me dices, El informal, Los Serrano, Efecto F, El Club de la Comedia o Siete vidas, donde se han realizado “manifestaciones injuriosas contra el honor, siempre en tono de burla y desprecio de sus capacidades, a su físico, a su solvencia, a su vida personal y, sobre todo, a su pretendida ubicación en la modernidad o en la antigüedad o a determinados segmentos del arco ideológico”.
Ante tal panorama, Emilio Aragón lo tiene muy fácil para acabar de una vez por todas con la alargada sombra del doctor Nacho Martín: no tiene más que negarse a pagar los tres milloncejos de euros que Pedro Ruiz considera imprescindibles para recobrar la tranquilidad de espíritu y la fe en la bondad del ser humano. El doctor Nacho no sabría decirle que no, y además le dejaría las llaves de su casa para que entrase cuando quisiera a saquearle el frigorífico y beber a morro leche del cartón.
Vale, también pide una rectificación pública y que se reconozca que ha habido una genuina campaña de desprestigio, pero esto último no lo puede negar Emilio Aragón ni en su momento más perverso. ¿Pruebas? Ehm, pues… ¿cómo pudieron los jefazos de TVE darle a Pedro Ruiz un programa tal que La noche abierta si no existe una conspiración a gran escala para hundirle?